Si dejamos una marca en las personas, ¿Por qué algunas marcas se resisten a perderse en el tiempo, en ese mar de momentos que es nuestra vida y no se borran nunca? ..Y somos esclavos involuntarios de esas vivencias que no logramos dejar atrás y que como imán nos atraen inconscientemente hacia esa persona para vivirlo todo de nuevo..?

Lo supe desde el primer día que te vi, incluso antes de aquella noche.. Ahora veo claramente que siempre lo supe...

 ... Apareciste, como reclamándome, como un dueño exige lo que es suyo... tan solo te miré.. desde ese momento comprendí que jamás podría alejarme de vos y más allá de las vueltas y más vueltas de la vida, era cuestión de tiempo que vuelvas a mí.. 

... Regresaste... y una vez más te miré.. te miré y te reconocí, como si mirando tus ojos reconociera a los lejos mi amor de otras vidas y hoy te miro y me pregunto, qué habrá pasado antes para sentirme así? para que te sientas así conmigo? para que estemos a pesar de todo, disfrutando cada segundo con una pasión descarnada que pocas personas tienen la dicha de vivir en su vida. 

¿Quién sos? ¿Quién sos para venir así y dar vuelta mi vida una vez más? adueñarte de mi pasión, de mi deseo, de mi tiempo, de mi dolor...

... Sin saberlo me obligas a ser consciente de la soledad que me acompaña desde hace largo tiempo.. como si la Soledad la reconociera, le hiciera una dulce reverencia cuando la ve y se aleja sonriente, olvidando que es caprichosa y egoísta, que era ella, la Soledad, la ama y señora de mi vida.. si la vieran cómo respeta a esa mujer... porque sencillamente no puede hacer nada ante su presencia.. 

Finalmente caigo en la cuenta que soy yo quien no puede hacer nada, siquiera soy dueño de lo que siento y que tanto me abruma... Cuando me voy de su lado, todo se torna confuso y me pesa la vida.. y me alejo esperando el próximo encuentro, deseando sentir, una vez más, todo mi ser vibrar así muy cerquita de ella...